jueves, 10 de marzo de 2011

El perdon.





Había  una joven quería disfrutar la vida, pero sus padres la protegían mucho y no la dejaba salir  a fiestas, ni con amigos.
Un día su novio la invito a salir a una fiesta, a la cual sus padres no la querían dejar ir, la joven enojada y en una aptitud rebelde se escapo de su casa y se fue a la fiesta a escondida de sus padres.
Cuando estaba en la fiesta, vio a su alrededor y miro que no era como pensaba, había muchos jóvenes perdidos, bebiendo alcohol  descontroladamente.
Se acerco a su novio y le dijo que quería regresar a su casa, pero su novio no quería llevarla, y   le dijo: todavía es temprano relájate y disfruta….
Unos segundos mas tardes, le insistió a su novio que la llevara a su casa, su novio ya borracho y molesto de su insistencia le dijo: Esta bien, te voy a llevar a tu casa.
Se suben al carro, y el joven acelérelo el carro, la joven le dijo, que fuera más despacio, pero él no le hizo caso.
El joven acelero aun mas el carro y no vio una jeepeta que se le atravesó  en frente, y chocaron, lamentablemente murieron todos menos la joven, pero ella quedo muy lastimada, cuando la llevaron al hospital, ella despertó y le dijo a la enfermera que la atendía: Por favor dígale a mis padres que me perdonen, por favor dígale que me perdonen…
La enfermera comenzó a llorar, y uno segundos después la joven murió, luego entro el doctor, que escucho desde afuera y le pregunto a la enfermera, ¿Por qué no le dijo que si, que se lo dirá a su padres?, la enfermera contesto: La persona que iban en la jepeeta eran sus padres, y habían muerto también en el accidente…   
Reflexión: A veces una aptitud rebelde y desobediente, nos puede costar mucho, antes de tomar una decisión analízalo, y piensa en que afectará tu futuro esa decisión.
Pedir perdón y reflexionar a tiempo puede librarnos de mucho sufrimiento, Dios nos da el regalo de la vida para que valoremos cada momento de nuestra existencia en este mundo.
“Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdono a vosotros en Cristo.” Efesios 4.32




No hay comentarios:

El Dueño de la cafetería

Un día un hombre  tomo la decisión de emprender su propio negocio. Desde pequeño su sueño fue tener una cafetería, pero no cualquiera...