La vida de
una persona no se basa en solo palabras ni en solo hechos, hay una línea
delgada que define a una persona como tal, es la que indica que puede ser un
humano libre o un simple esclavo de la vida que entre tantas vicisitudes no es
capaz de ver más allá del muro que construye la sociedad misma.
Queriendo
escapar de ese muro encuentra una fuerza
mayor que lo arrastra cada vez más a la inmundicia que ahoga en un mismo lugar
una y otra vez, pero hay una grito con poca fuerza que dice: auxilio! En baja
voz que no puede ser escuchada porque no le dan la fuerza suficiente para
gritar más fuerte.
Una vez que
ves la luz no es capaz de mantenerla, se deja atraer de la inmundicia, cotidianidad, ahogo
social y estrictos rendimientos, la oportunidad es única, un chance de poder
decir libertad a nuestro entorno, pero es como un vicio que con su olor desgarra y despierta el ayer y el pasado, y escapar como gacelas
es a veces imposible, porque como cordero caemos a sus pies, pero un solo tirón de ayuda y se lanza tras esa luz
de paz y amor que el olvido intento desaparecer.
Atte: A.R.A